
CODEPU manifiesta su alegría por el Premio Nacional de Derechos Humanos que el INDH otorgó en esta oportunidad al sacerdote jesuita José Aldunate.
Consideramos este galardón plenamente merecido, por la extensa trayectoria de lucha de Pepe en el campo de la defensa y promoción del respeto a las personas, el auxilio a los perseguidos y la lucha frontal y valerosa contra el terrorismo de Estado impulsado por la dictadura cívico-militar.
Un aporte a destacar en Pepe, es haber liderado el Movimiento contra la Tortura Sebastián Acevedo y con métodos no violentos haber luchado contra la tortura, el principal instrumento de la dictadura terrorista. Miles de chilenos y chilenas fueron víctimas de crueles y brutales formas de apremios, tanto físicos como psicológicos, con la cual no solo se buscó dañar al torturado, sino que extender, el dolor, el miedo y el inmovilismo a todo su entorno familiar, social y político.
Este reconocimiento a Pepe lo consideramos extensivo a otros religiosos y religiosas, católicos y protestantes, que se comprometieron en la lucha por los derechos humanos y la recuperación de la democracia en nuestro país. En Pepe reconocemos también a Roberto Bolton, a Rafael Maroto, a Blanca Rengifo, fundadora de nuestra institución y a tantos sacerdotes y religiosas que acudieron en auxilio de su pueblo, que lo acompañaron en sus luchas y por ello sufrieron también la prisión, la tortura, el asesinato y la desaparición.
Aplaudimos la decisión del INDH de reconocer a José Aldunate, en vida, mientras se acerca al siglo de existencia con múltiples dificultades de salud. Es una buena noticia para para todos los luchadores por los derechos humanos del pasado y del presente.
Gracias Pepe Aldunate. Felices nosotros por tu vida de lucha por los derechos del pueblo.