Intervención artística en Av. Bulnes, señalando 138 huellas de balas en edificios frente a la Moneda

image“BULNES INTERVENIDO” EN HONOR A LAS VICTIMAS DE LA VIOLENCIA TRAS EL GOLPE DE ESTADO DEL 11 DE SEPTIMBRE DE 1973.

La Intervención “Bulnes Intervenido” nació a raíz de un recuerdo que buscó con urgencia ser compartido con otros, con el deseo de mantenerse en la memoria y volverse colectivo, éste recuerdo era la certeza de que los hoyos en las paredes de los edificios del paseo Bulnes, eran huellas de balas.

Desde los 7 años, uno de los integrantes del colectivo, ve esas marcas de balas en el paseo Bulnes, recuerda que en los edificios frente a La Moneda también estaban marcados, alrededor de la Plaza de la Constitución, en La Alameda, en Nataniel Cox, era cosa de poner atención y encontrar, pero no todos sabíamos de esas huellas, algunos nos enteramos hace pocos años, otros nunca lo habían notado.

Así fue que el viernes 27 de Septiembre de 2013, se convocó a más de 100 personas en el Paseo Bulnes, para homenajearemos a las víctimas de los actos de violencia del golpe militar del 11 de septiembre de 1973, fijando el foco en las 138 huellas de balas que hoy persisten en un tramo del paseo Bulnes. A cada uno de ellos, entregamos un puntero láser, y por 30 minutos señalamos con los láser las huellas de estos edificios, denunciando masivamente, y a la vez recreando historias, construyendo una memoria colectiva, suponiendo los hechos reales en búsqueda de historias certeras, fuimos sin saberlo levantando una analogía de cómo hemos reparado nuestra memoria dolida por las violaciones ocurridas en dictadura, una memoria que escarba, que imagina encontrar verdad que nos acerque a justicia, para que así lleguemos a un nunca más y seamos capaces de reconocer la violencia, para defendernos y rechazarla.

Qué pasará con estos recuerdos? ¿Qué pasará con esta violencia? ¿Sólo algunos la recordarán? Hoy estas huellas están siendo borradas, desapareciendo bajo el estuco y las continuas capas de pintura, no existe resguardo de su existencia y pronto desaparecerán y con ello las historias del desastre se mantendrán como fantasías, permitiendo que la violencia se apodere de nuestras calles cuando así lo decidan los que hablan por nosotros.

El barrio cívico del que forma parte el paseo Bulnes es tal vez, la intervención urbana más importante que se haya realizado en Santiago, enmarca al palacio de gobierno en el centro de la civilidad y ciudadanía del poder político. Por él se proyecta el eje de simetría que desde la sede del poder político avanza su domino hacia la gran extensión austral del espacio territorial capitalino y nacional.

Al desconocer la existencia de éstas huellas, un trozo de historia deja de tener importancia para las futuras generaciones, pierden su valor memorial y con ello un pedazo de tiempo que nos construye.

Estas 138 huellas, en un breve tramo del Paseo Bulnes, fueron hechas a fuego a la altura de los edificios del Barrio Cívico, son huellas de la dictadura, son realidad para recuerdos de que esta historia no se nos olvidará y hechos de este tipo no deben volver a suceder.