CODEPU: 36 años en la lucha por los derechos del pueblo

En un día como hoy, el 8 de noviembre de 1980, en un local de calle Grajales se fundaba el Comité de Defensa de los Derechos del Pueblo, CODEPU. Encabezado por la abogada Fabiola Letelier y con la religiosa Blanca Rengifo y su enorme capacidad de organización y de articulación de voluntades, el organismo se convirtió en un actor de primera línea en la lucha jurídica, social, política y cultural contra la dictadura cívico-militar.

En los 80 el comité coordinaba no solo a un equipo jurídico, enfocado a la defensa de los combatientes encarcelados y la lucha por los derechos humanos; también alentó la coordinación social entre organismos de base de distintos frentes sociales; prefiguró en su directorio una alianza política de izquierda amplia, antecedente del MDP; colaboró a través de su boletín y distintos medios a romper el cerco comunicacional establecido por la dictadura;  llevó a cabo una valiosa labor de educación que ayudó a los grupos de base, a dotarse de herramientas de análisis de la realidad y de organización para la lucha; y, a través de su equipo de salud y de salud mental, socorrió a las víctimas de la represión y la tortura.

Esta labor no decayó un minuto, a pesar de los embates represivos, de los asaltos a nuestros locales y de las detenciones de nuestros compañeros y compañeras. A pesar del asesinato de nuestro secretario regional, Patricio Sobarzo y la muerte por enfermedad de Blanca Rengifo, nuestra fundadora.

El contexto histórico en que surgió CODEPU comenzó a variar a fines de la década y este debió ir adaptándose, con aciertos y errores, hasta llegar a nuestros días en los cuales continúa luchando en el campo jurídico por la reparación a los ex presos y presas políticas, patrocinando querellas por torturas y abusos sexuales. Manteniendo también una línea de trabajo en el campo de la salud mental hacia víctimas de la represión y sus familiares.

Estos esfuerzos están acotados por la escasez de recursos y de personal, pero aún en medio de tales dificultades, se mantiene el espiritu de solidaridad forjado en aquellos  años de lucha, Por algo cumplimos 36 años y nos preparamos a cumplir otros tantos, a pesar de los pesares.

Saludos a todas y todos en este aniversario.